Empresa

La Cooperativa San Isidro está integrada por unos 1242 socios procedentes de las poblaciones de Castillo Locubín y Alcala la Real principalmente. El vigor adquirido a lo largo de estos años por la Cooperativa San Isidro, se concreta, cuantitativamente, en una capacidad de molturación de 500.000 kilos al día y una capacidad de almacenamiento en las bodegas propias de 3.500.000 kilos de aceite; cualitativamente, el riguroso trabajo de la Cooperativa se ha visto, sobre todo, refrendado por el más exigente de los jurados, la amplia aceptación que nuestro producto ha tenido en el mercado.

En la actualidad cuenta con unas Instalaciones Modernas, las cuales constan de:

  • Un Patio de Recepción de Aceitunas con cinco Líneas de Limpieza y Pesaje, ocho Tolvas de almacenamiento, de 50.000 kg. cada una. Una tolva de orujo, una separadora pulpa-hueso, seis decanters de Molturación, una caldera y un sistema contra incendios.

  • Depositos
  • Tres Bodegas de Aceite con 27 depósitos en acero inoxidable, brillo espejo, con capacidad máxima de 1.800.000 Kg. de aceite, que se hacen necesarios debido a las diferentes variedades de aceitunas existentes, y las consiguientes separaciones por calidades de aceite, imprescindibles de realizar.

  • Un almacén de productos fitosanitarios y abonos para socios, un surtidor de gasoleo A y otro de gasoleo B para socios de nuestra cooperativa. Cinco balsas de evaporación de agua procedente del proceso de extracción de aceite de oliva, una envasadora, laboratoria propio para obtención de rendimiento graso de aceituna de nuestros socios, oficinas y sala para impartir cursos de formación a socios y personal en general.
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Se ofrece la total automatización del sistema de producción (Fábrica, Bodega, Laboratorio), y la completa informatización de la cooperativa.

El origen de la S.C.A. San Isidro se remonta a 1.954, cuando un pequeño grupo de olivareros deciden asociarse para crear su propia almazara y defender mejor su producto. La Cooperativa cobra, definitivamente, carta de naturaleza con la celebración de la asamblea constituyente en 1.954. Desde esa fecha la Cooperativa ha recorrido un largo camino hasta consumar el proceso integral dirigido a la producción de aceite de oliva, proceso que abarca desde la recepción de la aceituna hasta el embotellado y venta final del aceite.

Nuestro aceite es el resultado de una materia prima que posee unas cualidades organolépticas privilegiadas para su transformación en aceite. Sobre esta premisa de calidad se aplica una esmerada tarea que comienza con la clasificación del fruto por parte del olivarero y continua con el posterior cuidado en la obtención del zumo en la almazara. Toda una secuencia que define nuestra seña de identidad y nuestro compromiso de calidad con el público.

El aceite virgen obtenido constituye un mosto totalmente natural que procede de frutos de buena calidad, poseedor de excepcionales características de olor, color y sabor, conservando íntegramente su contenido en vitaminas, ácidos grasos esenciales y otros productos naturales de gran importancia dietética.